The art of performance for Abel Azcona has always been conceived as a game when addressing issues of violence, abuse, and child maltreatment. The artist's most recognized works of protest brought the harrowing narrative to playgrounds and games like musical chairs. Abel Azcona has arrived in Goa, India. This time, he has designed twelve different games to address themes such as maternal absence, motherhood, abandonment, and child abuse or maltreatment. The game and the art of performance serve as tools for outcry, liberation, and empowerment. This project will unfold in the orphanages of Siolim Ishkripa, Calangute Orphanage, Assagao Orphanage, and El Shaddai. Hundreds of abandoned children alongside Azcona will activate these pieces of collective catharsis through play and art.

Photography: Shikhar Rastogi


El arte del performance para Abel Azcona siempre ha sido concebido como un juego cuando se habla de violencias, maltrato y abusos infantiles. Las obras más reconocidas de denuncia de artista acercaban el terrible relato a los columpios o el juego de las sillas. Abel Azcona ha llegado a Goa, India. Esta vez ha diseñado doce juegos diferentes para hablar de ausencia de madre, de maternidad, de abandono, de abuso o maltrato infantil. El juego y el arte de la performance como herramienta de grito, de liberación y de empoderamiento. Un proyecto que se va a desarrollar en los orfanatos de Siolim Ishkripa, Orfanato de Calangute, Orfanato de Assagao y El Shaddai. Cientos de niños abandonados junto a Azcona activaran mediante el juego y el arte estas piezas de catarsis colectiva.

Fotografía: Shikhar Rastogi